Esta mañana "wasapeando" con una de mis hermanas en un momento determinado me preguntó...
"¿Cuál es el viaje q más te ha gustado?"
Y mi respuesta (en vez de decirle tal o cual arquitectonicamente hablando, por la belleza de sus lugares o por lo famoso que sea...) ha sido:
Por aventurero... "x"!!!!,
Por anecdótico... "x"
Por divertido..."x",Por distinto..."x",
Por entrañable... "x"
(pongo "x" para no hacer publicidad jeje)
Hay muchos países que me han gustado (creo que os he dicho que viajar es una de mis debilidades...y que siempre tengo la maleta a mano :-)) pero los que más recuerdo son aquellos teñidos de algo (aventura, misterio, diversión, picardias...) todas las ciudades tienen mucha belleza, mucho encanto, me encanta perderme por sus callejuelas sin rumbo fijo e intentar meterme en sus costumbres, en como se vive ahí... pero lo que lo hace verdaderamente irrepetible es lo que se ha sentido/vivido durante el viaje.
Extrapolandolo a nuestra rutina diaria, pensaba que igual pasa en nuestro sitio habitual, en general no hacemos grandes cosas, pero podemos ir tiñendo nuestros días de vivencias especiales que los irán haciendo únicos... Podemos disfrutar de como nos acaricia el viento en la cara, de esas gotitas que tímidamente empiezan a caer, o de los primeros rayos de sol cuando empieza el buen tiempo... De una buena charleta, lectura, peli, juegos, paseo... de una tarde de risas o incluso de compartir algunas penas -que al final parecen más pequeñitas...- de tantas cosas, tantos momentos... que podemos convertir cada día en especiales, ¿os animáis?
